Para Hadley Freeman, las películas de los años 80 lo tienen todo. Comedia en Tres hombres y un bebé, Hannah y sus hermanas, Cazafantasmas y Regreso al futuro; todo lo que un adolescente necesita saber en La chica de rosa, Un experto en diversión, Digan lo que quieran, El club de los cinco y Mystic Pizza; lo mejor de la acción en Top Gun, Duro de matar, Un detective suelto en Hollywood e Indiana Jones y el templo maldito; Amor y sexo en 9 semanas y media, Splash, Sobreviviendo, Reencuentro y Los búfalos de Durham; y diversión familiar en La sirenita, ET, Big, Dulce hogar... a veces y Apóyate en mí. En The Time of My Life, Hadley pone su obsesión por el cine a buen uso, detallando a los actores clave, géneros y tópicos de la década. Ella recuerda un mundo cinematográfico en el que los banqueros son invariablemente malvados, donde los niños siempre son más sabios que los adultos, donde la ciencia se abraza con un entusiasmo intenso y el futuro se ve con una emoción vertiginosa. Y considera cómo los cambios entre las películas de entonces y las de hoy dicen mucho sobre las expectativas cambiantes de la sociedad respecto a las mujeres, los jóvenes y el arte, y explica por qué La chica de rosa debería incluirse inmediatamente en los programas escolares. Desde cómo John Hughes descubrió a Molly Ringwald, hasta cómo la amistad entre Dan Aykroyd y John Belushi influyó en la evolución de la comedia, y cómo Eddie Murphy hizo que América creyera que la raza puede ser trascendida, esta es una carta de amor altamente personal y divertida a las películas de los ochenta, pero también una visión intelectualmente vigorosa y bien investigada sobre los tiempos cambiantes de la industria cinematográfica The Guardian.