Reseña
Ultima novela de la Trilogía Maramargo. A sus 93 años, Elvira Garrido Arosemena ha sido testigo de excepción de mucho de lo acontecido en Panamá desde los inicios de la república. Ella encarna los valores de una estirpe y juzga, con mirada penetrante, la actuación de una familia que ha sido protagonista de las contingencias de una zona de tránsito codiciada por muchos y marcada por un destino manifiesto. El jardín de las cenizas concluye una saga familiar que se inició con El último juego y Lobos al anochecer, y describe, de manera ágil y ajustada al ritmo de los tiempos, la historia de Panamá y de sus gentes durante el siglo XX. A través de sus páginas sabemos de sus costumbres, escuchamos sus lenguajes, presenciamos una serie de negociaciones diplomáticas, compartimos amores y desamores, nos enteramos de una serie de golpes de Estado, de invasiones militares, de maquinaciones de la francmasonería, del socialismo, del comunismo y del anarquismo por adueñarse del gobierno; somos testigos de magnicidios y cuartelazos, padecemos las arbitrariedades de narcodictaduras y de asaltos guerrilleros, y observamos cómo un grupo de nacionales y extranjeros se ha dedicado, de manera impune, al trasiego de armas y de drogas, al lavado de dinero, y al enriquecimiento ilícito a costa de las arcas nacionales. Al igual que las novelas anteriores que conforman la saga Maramargo, El jardín de las cenizas es una obra que seduce, instruye y zarandea al lector con eficacia incontestable.